Las 33 masacres -homicidios de tres o más personas en un mismo hecho- ocurridas en lo que va de 2022 han cobrado 122 vidas, según Migdonia Ayestas, coordinadora del Observatorio de la Violencia (OV) de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Los hechores «generalmente son sicarios que tienen el conocimiento y tienen la preparación para hacer este tipo de hechos, tienen las armas, logísticas, vehículos y muchas veces indumentaria militar o policial. Además tienen el dinero para empezar a estudiar a la víctima», indicó.
Asimismo, detalló que detrás de estos sucesos se encuentran bandas criminales, maras y pandillas o narcotraficantes por peleas de territorio en barrios y colonias, así como por enemistades y extorsión.
También, explicó que a veces el objetivo es una persona, sin embargo, los criminales se cercioran de no dejar testigos y por ello ocurren las masacres.
«Hay tres casos más (homicidios múltiples) en comparación con el año pasado y en las mismas fechas hay 18 víctimas más», precisó Ayestas, detallando que esto representa un aumento del 20%.
El más reciente de estos hechos ocurrió la noche del sábado 13 de agosto, donde murieron cinco personas en una masacre suscitada en la colonia Lomas de San Juan, en el sector Lomas del Carmen, de San Pedro Sula, Cortés.
10 son asesinadas cada día
La coordinadora del OV-UNAH informó que al menos 2 mil 100 personas murieron de manera violenta en los primeros siete meses de 2022, registrándose un promedio de 10 personas asesinadas cada día, siendo fines de semana los de mayor incidencia.
De igual manera, indicó que en los primeros cinco meses del presente año se documentó una tasa del 16% de muertes violentas por cada 100 mil habitantes, con 1,530 muertes violentas, dato en el que hubo una reducción del 7% con respecto a 2021.
Por otra parte, Ayestas manifestó que a los tres municipios más afectados por la violencia: Distrito Central, Francisco Morazán; San Pedro Sula y Choloma en Cortés; se les unen Catacamas, Olancho y Danlí, El Paraíso.
«Catacamas tiene su análisis especial porque se está incluyendo el narcotráfico dentro de la zona, pero Danlí es por la expansión de las maras y pandillas y tener una cárcel tan cerca (La Tolva en Morocelí, El Paraíso)», finalizó.
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