Desde 1986 Daniel Ortega ha sido el candidato a la presidencia de Nicaragua por el partido Frente Sandinista de Liberación Nacional, perdiendo en el año de 1990 frente a Violeta Barrios de Chamorro, seguido en 1996 ante el caudillo Arnoldo Alemán y posterior en el 2001 con el ingeniero Enrique Bolaños (q.e.p.d), pero fue en el 2007, tras varios intentos que logra llegar nuevamente al poder con un pacto entre cúpulas políticas.
Es así que, hasta esa fecha, Ortega acumulaba cinco postulaciones a la presidencia de Nicaragua. Durante su mandato hasta el 2011, siempre fue acompañado de personalidades del Frente Sandinista de Liberación Nacional, pero la historia cambia en el 2016 cuando anuncia su fórmula presidencial, esta vez acompañado de Rosario Murillo, su esposa y coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía.
Con el anuncio de la fórmula presidencial del FSLN, Daniel Ortega acumula siete postulaciones a la presidencia de Nicaragua por el partido del que se ha adueñado y, que no ha conocido otro candidato presidencial que no sea Ortega.
En el 2021, año donde se prevé se realicen elecciones generales en Nicaragua, Ortega nuevamente postula a su esposa Rosario Murillo como candidata a la vicepresidencia de Nicaragua, un hecho sin antecedentes y que se da en un contexto donde ambos han sido acusados por crímenes de lesa humanidad y violaciones a los derechos humanos en contra de los nicaragüenses.
Tras el anuncio en el Congreso Sandinista, realizado esta tarde de manera virtual, el sancionado presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras dijo que Ortega y Murillo fueron elegidos de manera “unánime” por los congresistas sandinistas en el pleno.
Sin embargo, existe una disyuntiva en filas internas del partido, ya que hay sectores que no han querido que Murillo sea la fórmula de Ortega.
Un proceso electoral incierto
Además de la peculiaridad de reelegir nuevamente a su esposa, Daniel Ortega se enfrente a un escenario distinto de elecciones pasadas. Esta mañana, la Unión Europea impuso sanciones en contra de su esposa, vicepresidenta y candidata a este cargo Rosario Murillo, junto a ella, su hijo Juan Carlos Ortega; la presidenta de la Corte Suprema de Justicia Alba Luz Ramos; el asesor para asuntos comerciales Bayardo Arce, entre otros funcionarios vinculados por delitos en contra de la población.
Hace unos meses, el Departamento de Estado de los Estados Unidos sancionó a la hija de la pareja presidencial, Camila Ortega. Otros dos hijos se encuentran también sancionados por la comunidad internacional.
Varios funcionarios han desfilado como candidatos a sanciones por sus vínculos comerciales y de acciones represivas en contra del pueblo de Nicaragua.
El proceso electoral del 2021 en el país se realizará en medio de un proceso de incertidumbre donde varios sectores de la población insiste en que no es viable ir a depositar el voto, sin embargo, partidos catalogados como “colaboracionistas al régimen” insisten en ir a elecciones.
Esta mañana, ante el Consejo Supremo Electoral, varios partidos políticos, entre ellos Ciudadanos por la Libertad inscribieron a sus precandidatos presidenciales.
“No tengo comentarios”, respondió el precandidato de ese partido, Óscar Sobalvarro cuando se le consultó sobre las sanciones que se dieron esta mañana por parte de Europa.
Hasta el cierre de esta nota informativa, el Gobierno de Nicaragua no se ha referido a las sanciones por parte de la Unión Europea en contra de su esposa y ahora, candidata de formula.
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