El aumento de 3.00 lempiras a la tarifa del transporte urbano será efectivo a partir del próximo lunes 7 de noviembre en las ciudades de Tegucigalpa, Francisco Morazán; La Ceiba, Atlántida; Choluteca, Choluteca; y en San Pedro Sula, Cortés, advirtió hoy jueves el transportista hondureño, Jorge Lanza.
«Esta situación no es nada halagadora para la población, pero es algo que necesita y requiere el transporte porque tenemos sendos problemas con extorsión, alto costo en la canasta de repuestos y otros», dijo el representante de los transportistas.
Lanza aseguró que en las próximas horas comenzarán a pegar volantes en los buses ejecutivos o «rapiditos» y en los autobuses grandes o amarillos, para anunciar a los usuarios la nueva tarifa que deben pagar a partir de la próxima semana.
De referencia, en Tegucigalpa, capital de Honduras, el valor del pasaje de los «rapiditos» pasará de 13.00 a 16.00 lempiras, y el del bus amarillo de 6.00 a 9.00 lempiras.
Acuerdos con Gobierno
El dirigente recordó que el Gobierno a través del IHTT determinó mediante estudios el valor real de las tarifas del transporte urbano, interurbano y taxis colectivos, y autorizó un aumento tras un acuerdo en abril de 2022.
Específicamente al sector urbano se aprobó un ajuste de 3.00 lempiras, pero en subsidio para no afectar el bolsillo de los usuarios de los «rapiditos» y buses amarillos.
Ante eso, las autoridades acordaron entregar un bono compensatorio a los transportistas, pero a casi siete meses del acuerdo «no hemos recibido ni un cinco», reclamó Jorge Lanza.
El dirigente confió que el Gobierno sí implementará una tarjeta electrónica para los pasajeros de los buses urbanos, pero mientras no lo tengan deberán pagar los 16.00 lempiras, salvo a una solución que les pueda dar el IHTT en las próximas horas.
Según los transportistas, son480 millones de lempiras que les adeuda el Gobierno en concepto del bono compensatorio y esperarían que se les honre esa deuda.
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